Estas instalaciones en desuso se convertirán en naves logísticas adaptadas a las exigencias de cualquier cliente empresarial que desee emplearlas en el futuro
Nueva operación logística en el entorno de Zaragoza. Las instalaciones de Tata Motors, en el polígono Empresarium de La Cartuja Baja, en el corredor de la carretera de Castellón, serán derribadas para acoger grandes naves logísticas.
Los suelos de la factoría han sido adquiridos por Panattoni, una empresa que se dedica a construir grandes naves industriales para operadores logísticos, que levantará sobre una parcela de 114.000 metros cuadrados una infraestructura de «última generación y elevada tecnología». Eso sí, el almacén construido será de apenas 54.000 metros cuadrados, el cual se podría adaptar a uno o varios clientes, que podrá dividirse en módulos.
Tendrá 70 muelles para carga y descarga, cuatro para furgonetas y, por otro lado, un aparcamiento para 480 personas, lo que da una clara idea de los usos que puede albergar en el futuro y que podrá dar trabajo a centenares de personas. La altura llegará a los 10,5 metros y podrá incluir una zona de oficinas.
El promotor inmobiliario ha destacado que se trata del cuarto proyecto en Zaragoza tras los que tiene en el mismo polígono y en PlaZa, que en algunos casos en las fases I y II alcanzan una gran ocupación.
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Tata Motors, de capital indio, abandonó definitivamente las instalaciones hace una década (despidiendo a 300 empleados), aunque la trayectoria de la planta se remonta años atrás cuando centenares de zaragozanos trabajaron en Hispano Carrocera, empresa que se dedicaba a la fabricación de autobuses y que fue adquirida por Tata.
Eso sí, la empresa asiática volvió a salir a la palestra en la región hace apenas un año cuando se interesó por Aragón para implantar una gran fábrica de baterías en Zuera, idea que acabó desechando en favor de Reino Unido, que ofrecía «mayores garantías» en diferentes aspectos, según comunicó la cotizada en la bolsa de Bombay.
Ahora la gran incógnita es conocer quién ocupará las nuevas instalaciones para las que seguro muchas compañías se interesarán debido a la buena situación geográfica de Zaragoza, como polo logístico y entre los principales puertos del país.
Es una operación bastante habitual en el mercado logístico. Las operaciones «llave en mano» son aquellas que se construyen con o sin cliente final, pero cuyo fin es arrendarlas a operadores que deseen entrar en breve espacio de tiempo sin realizar grandes obras de adaptación de las naves.
El siguiente paso de la empresa será pedir las licencias de derribo y construcción, una vez se presenten los proyectos en Gerencia de Urbanismo, quien tendrá que autorizar los trabajos.
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