Conoce cómo son los nuevos tranvías de Zaragoza y cuál es la principal ventaja que, al inicio, puede despistar a los viajeros que se montan
El tranvía de Zaragoza ha estrenado, al fin, dos nuevos convoyes pagados al 90 % por Fondos Europeos. Tras un largo periplo de ‘marchas en blanco’ (realización de pruebas en la vía de los convoyes), los tranvías ya están dando servicio entre el barrio de Valdespartera y Parque Goya.
Con una inversión que ha rozado los 10 millones de euros, el consistorio maño solo ha tenido que aportar 10 % del gasto total. Si tenemos en cuenta que con estos tranvías se podrá reforzar la hora punta en el mes de septiembre, la ganancia esperable de viajeros al tener más servicios en circulación hará que se puedan amortizar más rápido que los Urbos III (más antiguos) que recorren la ciudad.
Desde este momento, la flota de tranvías disponibles en Zaragoza sube de los 21 a los 23 convoyes. Hay que tener en cuenta que, normalmente, en el invierno, circulan en hora punta 18 convoyes (dejando tres en reserva), por lo que si se cumplen las promesas políticas, con la vuelta a la normalidad en trabajos y centros educativos, habrá circulando 20 tranvías y mejorado las frecuencias a los 4,5 minutos en horario de máxima afluencia.
Todo lo que debes saber de los nuevos convoyes del tranvía de Zaragoza: la novedad que te despistará las primeras semanas
Ya son miles los ciudadanos que han visto los nuevos tranvías. La mayoría de ellos se han visto sorprendidos a la hora de usar el aglomerado transporte tranviario de Zaragoza, y han destacado que los nuevos vehículos son más luminosos y que mejoran la información que se proporciona al viajero.
La novedad que puede despistar a los viajeros es que las validadoras han cambiado de lado. Ahora se sitúan en las puertas de entrada, pero de manera lateral y no frontal. Es decir, no las encontrarás de frente al montar en el convoy, sino a un lado. Esto, a medio plazo, será positivo, ya que hará que los viajeros entren al tranvía y validen su viaje sin que otras personas que quieran ascender al convoy bloqueen el cierre de puertas.
Otra de las grandes ventajas es que se han eliminado los escalones. Así, en la parte central, donde se sitúan los «asientos de cuatro», no será necesario subir o bajar el escalón que sí tienen el resto de unidades. Asimismo, estos asientos no son de madera, sino de Plástico Reforzado con Fibra de Vidrio y, es más, se reorganizan parte de los mismos suprimiendo la mitad de los asientos abatibles.
Por otro lado, tras la experiencia de la pandemia, las nuevas unidades mejoran la ventilación y la filtración de particular. La novedad más importante en este apartado es que los sistemas de climatización disponen de sus propios medidores de CO2.
En el caso de las pantallas, estas son más luminosas y cambian el punto donde se sitúan, puesto que ahora habrá dos en la cola y cabeza del convoy, justo en el acceso del conductor a la cabina de trabajo.
También se incorporan asideros verticales, por lo que se mejora la seguridad y accesibilidad de los viajeros. Siguen siendo de color rojo. Además, el suelo es de caucho, por lo que existe una elevada resistencia al deslizamiento y, por otro lado, hay ventanas en cabina, mejorando la visibilidad del conductor.
Por último, la megafonía informa de las correspondencias (bus, aparcamiento intermodal bonificado o Cercanías Renfe) en cada parada. Mientras, el pitido de cierre y apertura de puertas es más sonoro.