Pese a no existir nubosidad, el sol parece no brillar con fuerza en España y, especialmente, en Aragón: ¿qué está ocurriendo?
Durante las últimas horas, el cielo de Aragón y de parte del resto de España (especialmente en la mitad norte peninsular) se encuentra algo plomizo.
No existe nubosidad, pero si algo llama la atención es que el sol parece brillar con poca fuerza. Algo que en pleno mes de agosto, con la canícula, no es normal. Eso sí, ha coincidido con una bajada generalizada de las temperaturas, gracias al cierzo, que ha estado soplando con rachas de hasta 70 kilómetros por hora.
Son muchos los ciudadanos que se han dado cuenta de este hecho, quienes han pensado que se trataba de neblina, contaminación o lo han relacionado con un incendio forestal cercano. Sin embargo, no hay ningún gran incendio que afecte a monte o zona de montaña cercana, al menos en España.
La explicación de encontrar un cielo tan plomizo y “sucio” se encuentra a 7000 kilómetros de distancia. Y el fuego, que afortunadamente no afecta a España, sí estaría detrás de la “guarricie” que hay en el cielo.
Los incendios forestales en Canadá, a 7000 km de distancia, explican el estado del cielo que tenemos en parte de España
Los incendios forestales en el país norteamericano llevan afectando semanas a miles de hectáreas. El fuego, unido a las altas temperaturas, están poniendo en jaque a los servicios de emergencia del país.
Las llamas han vuelto a reactivarse en diferentes áreas de Canadá, durante los últimos días, lo que propiciado que las extensas nubes de humo lleguen a alcanzar por el Océano Atlántico a Europa, siendo España uno de los países afectados.
¿Por qué llega ahora el humo de Canadá a España? Básicamente por el cambio en la circulación atmosférica. En estos momentos nos encontramos ante la influencia de una masa de aire procedente de el norte de América. Esta es más fría y, en el caso del valle del Ebro, ya nuestro país, ”activa” viento más fresco del noroeste, lo que provoca que el humo del incendio, algo difuminado, se vea arrastrado hasta nuestras latitudes.
Se trata en Aragón de un estado del cielo que se podría asimilar a cuando nos afecta la calima procedente del norte de África. En este momento, pese a no tener nubes, el cielo deja de verse azul y empeora la calidad del aire por partículas de polvo en suspensión que llega a nuestra zona cruzando parte de la península y el Mediterráneo. Algo que ocurre ahora con el humo procedente de Canadá.