Las viviendas ya están en construcción, darán por un lado al Anillo Verde y tendrán vistas al parque Ciudad de Maska, junto al barrio Oliver, aunque quedan situadas en Miralbueno

El barrio de Miralbueno continúa consolidándose como uno de los enclaves residenciales más demandados de Zaragoza. Su ambiente tranquilo, combinado con buenos accesos por carretera y cercanía a las principales circunvalaciones, lo convierten en una opción muy atractiva para numerosas familias que buscan calidad de vida.
En los últimos meses, el barrio ha experimentado un notable impulso comercial, gracias a la apertura de nuevos establecimientos de hostelería y supermercados, lo que refuerza su carácter de zona en expansión. Sin embargo, los vecinos siguen reclamando mejoras en el mantenimiento de espacios públicos, especialmente en zonas verdes y alcorques, así como una dotación de servicios públicos acorde al ritmo de crecimiento de la población
Pese a estos inconvenientes, no paran de surgir nuevas promociones de viviendas en todos los flancos del barrio. En el área más cercana al Corredor Verde o el Centro Comercial Augusta es la que más auge está registrando. Aquí, por ejemplo, se están construyendo urbanizaciones de lujo con viviendas que se llegan a vender por 700.000 €.
Auge inmobiliario junto al Corredor o Anillo Verde en el barrio de Miralbueno: otra nueva promoción de viviendas que ya se erige junto a Oliver
Una de las urbanizaciones que ya ha comenzado a construirse en Miralbueno es Residencial Amaranto, una promoción impulsada por el grupo Eizasa, que contempla la edificación de 34 viviendas con amplias zonas verdes y piscina central. El proyecto se ajusta a la normativa urbanística vigente para un terreno con historia, adquirido a través de una subasta al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).
El suelo pertenecía antiguamente al ámbito ferroviario que ocupaban las vías del tren Zaragoza – Teruel – Valencia. Tras la creación del Corredor Verde y la urbanización progresiva del entorno, esta parcela había quedado en desuso, convertida en un solar con maleza y residuos. Ahora, con esta nueva promoción, el terreno se transforma en un espacio residencial de calidad, integrando diseño, sostenibilidad y servicios.
Cada una de las 34 viviendas dispone de tres dormitorios, dos baños completos, un aseo y una estancia adicional para lavandería o limpieza. Las distribuciones están pensadas para ofrecer espacios amplios y luminosos, con salones conectados a terrazas que actúan como una prolongación del interior, generando una experiencia de hogar abierto al exterior.
En cuanto a los acabados, se apuesta por un estilo moderno y funcional: suelos porcelánicos de alta resistencia, sistemas de climatización por aerotermia, calefacción por suelo radiante y refrigeración eficiente. La ventilación mecánica con recuperación de calor mejora el confort y reduce el consumo energético. La producción de agua caliente también se realiza mediante aerotermia, reforzando el compromiso con la eficiencia y el respeto al medio ambiente.
Cada vivienda incluye plaza de garaje y trastero, además de preinstalación para puntos de recarga de vehículos eléctricos. Las zonas comunes están diseñadas para fomentar el bienestar familiar, con piscina comunitaria, área infantil y jardines privados, ideales para el esparcimiento y la vida en comunidad.
Residencial Amaranto se sitúa en una de las zonas con mayor proyección del barrio. Justo enfrente se encuentra el colegio Julio Verne, que ofrece educación secundaria y forma parte activa de la comunidad educativa del distrito. Además, los futuros residentes disfrutarán de una conexión directa con amplias zonas verdes como el corredor verde y el parque Ciudad de Maska, que marca el límite entre los barrios de Oliver y Miralbueno.